Encamino sus pasos hacia su casa cuando las campanas de la iglesia empezaron a sonar, tocando a muerto.
Llego y la puerta estaba abierta. Entro sin decir nada encontrándose a su familia vestida de negro, llorando.
Fue a su habitación. Se vio tendida en la cama con las manos cruzadas en el pecho.
La situación era tan extraña que pensó que era un sueño.