
A través del estilo de un documental audiovisual el autor presenta como un descubrimiento de física permite viajar al pasado para conocer los acontecimientos históricos directamente concretamente las atrocidades del escuadrón 731.
Todo esto genera conflictos internacionales que se saldan con la prohibición de los viajes en el tiempo.
El escuadrón 731 fue un program encubierto de investigación y desarrollo de armas biológicas del ejercito imperial japonés que llevo a acabo experimentos sobre humanos durante la segunda guerra chino-japonesa (1937-1945) y segunda guerra mundial.
Estas investigaciones se basaban en la idea de la supremacía racial japonesa, que eran similares en planteamiento a la ideología de los nazis.
En este caso los viajes en el tiempo son una mera excusa para poner de relieve que los gobiernos son capaces de esconder los hechos mas atroces de su pasado para conseguir ventajas en económicas.
El estilo sobrio del texto te envuelve en una atmosfera opresiva y de angustia al ver la capacidad del ser humano de hacer cosas horribles contra sus propios congéneres.
La historia habla de China y Japón pero puede extrapolarse a cualquier parte del mundo que haya sufrido genocidio o crímenes de guerra.
En definitiva es una obra excelente en la que se hace más que evidente que la ciencia ficción puede, y debe, tener una función social.